En nuestros comienzos armados con cuero italiano, gracias al desarrollo en argentina se comenzó a curtir localmente, mejorándolo, dado que el cuero para las fustas  no puede ser pintado sino curtido con el método tradicional antiguo, sumergiéndolo dos semanas en bateas hasta lograr el color deseado, logrando así preservar el color del cuero luego de ser retobado, mojado y estirado.

Al ser solo cuero con curtido vegetal, sin cromo, nuestro cuero desarrollado específicamente para la creación de fustas, mantiene la particularidad de ser un cuero vivo, pero sin perder resistencia ni color.

Nuestro proceso artesanal de fustas consta de un platero orfebre que desarrolla solo para fustas piezas únicas e irrepetibles, lo que nos limita en la cantidad de la producción pero nos sobrevalora en calidad de producto, que solo expertos y entendidos de los deportes ecuestres sabemos valorar, diferenciándonos de la producción masiva.

La fibra de vidrio utilizada en nuestros procesos continua siendo importada desde Inglaterra , líder mundial en la fabricación de antenas para tanques de guerra.

El resto de los insumos que utilizamos para la fabricación siguen siendo prácticamente los mismos que desde hace 3 generaciones que fabricamos fustas con el mismo método. Algodón natural,  cola caliente de carpintería, fibras de papel e hilados de lino, logran un producto 100% artesanal, natural y  biodegradable.

Nuestros productos han pasado de ser productos de talabartería para pasar a ser artículos de joyería.